Las Pymes y el Diseño

Las Pymes y el Diseño

Las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyme) son la mayor fuente generadora de empleo de nuestro país, sin embargo el proceso de globalización de la economía mundial y los avances tecnológicos han generado un entorno cada vez más desafiante para dichas empresas, especialmente a nivel local, esta empresas pueden crear riqueza y empleos en Valparaiso, Concepción y otros lugares de Chile, pero cada vez les es más difícil competir con los productos y servicios que vienen de fuera.

Este es el sector que ha quedado mayormente expuesto a la pérdida de competitividad en el proceso de internacionalización o de integración de Chile a la economía mundial, lo que es muy relevante, tomando en cuenta la participación y expectativas de la industria chilena en la Expo Shanghai 2010 inaugurada el domingo 1 de mayo.

Esta pérdida de competitividad hace que, por ejemplo, una gran cantidad de pequeñas y medianas empresas chilenas se vean obligadas a salir del mercado internacional cada año, mientras otras tantas entran esperando permanecer en él. Esto se debe en gran medida a que, generalmente, las empresas chilenas compiten por precios y desechan las variables ofrecidas por el valor agregado que ofrece el diseño e innovación.

El escenario de la innovación a través del diseño abre a las empresas chilenas grandes posibilidades de nuevos nichos de mercado que son factibles de penetrar, aunque esta tendencia no se refleja en el ámbito de las MiPyme, puesto que éstas no han abordado variables estratégicas eficientes que las hagan más competitivas en los mercados extranjeros. La gran mayoría de ellas focaliza sus actividades innovativas en la mejora de los márgenes, es decir, en la reducción del uso y costo de materiales, en la optimización de procesos de producción y la supresión o abaratamiento de la mano de obra, procesos que corresponden a un 95% del costo de producción de un producto manufacturado e inciden solamente en un 30% de su precio final.

Pero, de acuerdo a la experiencia internacional, el diseño de un producto o servicio, cuyo costo corresponde como promedio a un 5% de la producción, incide en el 70% restante del precio final del producto. En Chile, además, el porcentaje correspondiente al componente innovación impulsada por diseño es muy inferior a ese 5%. En consecuencia resulta evidente que cualquier esfuerzo focalizado en el mejoramiento del diseño e innovación tiene efectos muy positivos en la competitividad del producto final o servicio. Una solución para revertir este escenario es la aplicación de un proceso sistemático de innovación impulsado por diseño mediante la aplicación de un valor agregado. Ello facilitaría la internacionalización de las MiPyme y su integración al mercado global

Según antecedentes manejados por ProChile, en los sectores de exportaciones no tradicionales, las Pyme tienen una gran capacidad de adaptación a la reorientación de los mercados; pero, al mismo tiempo, muestran enormes vulnerabilidades relacionadas a su estilo de gestión y al desconocimiento de los mercados y de los productos o servicios competitivos que se dan allí.

Este fenómeno se ha mantenido estable durante los últimos años, hecho que representa una muestra más del problema estructural que sufre el sector exportador chileno y, en especial, el de las micro, pequeñas y medianas empresas. Desde esta perspectiva, el par Diseño+Innovación tiene una importancia estratégica fundamental para el desarrollo de estas empresas productivas y de servicios del país, puesto que, si se orientan sus esfuerzos innovativos en esta dirección, se puede aumentar el valor de los productos y servicios en una magnitud impensable, la que permitiría revertir la situación actual

Por lo anterior, me parece importante sugerir que en este sector de la economía se focalicen los esfuerzos y se busquen oportunidades de diseño e innovación asociados al ámbito de la transferencia tecnológica desde el campo de I+D hasta innovaciones sociales y de mercado. Lo anterior se puede expresar en un esquema combinado de innovación en productos, innovación en procesos, innovación en servicios, innovación tecnológica e innovación en modelos de negocios. Como consecuencia de lo anterior, se podría prever que el potencial de aplicaciones en este sector de la economía es enorme, que tiene un bajo costo relativo y una muy alta incidencia sobre el valor agregado o margen y, por consiguiente, en la competitividad del producto final o servicio.

Escrito por:

CARLOS HINRICHSEN

DIRECTOR ESCUELA DE DISEÑO DUOC UC